El libro relata diferentes aspectos y reflexiones sobre el oficio de cirujano. Empieza en los años que Joan-Albert Mijares era estudiante interno. Explica las increíbles experiencias de un joven que superó las dificultades del mundo de la cirujía gracias a su férrea voluntad y admiración por esta profesión. También relata la relación con los pacientes y algunos casos que, por su originalidad, deberían formar parte de la historia de la medicina. Todas las historias que contiene el libro son autobiográficas y muestran cómo era la medicina hace cincuenta años en nuestro país. No deja de sorprender que en la actualidad, un momento de alta tecnificación, continúe viva la defensa de las características clásicas de un buen cirujano: ojos de águila y corazón de león.
Joan-Albert Mijares (Barcelona, 1940) tuvo vocación por la medicina desde que era bien pequeño. Se licenció el año 1965, con los títulos de Especialista en Cirugía General, en Traumatología y Ortopedia. También es doctor por la Universitat Autònoma de Barcelona. Su gran atracción por la enseñanza le condujo a impartir clases durante más de diez años en la Universitat Autònoma de Barcelona. En 1977 es contratado por el Gobierno de Andorra para contribuir a la apertura y a la organización del Centro Hospitalario, donde al nal se quedó de jefe del Servicio de Traumatología y Ortopedia, hasta su jubilación voluntaria en 2009.